Una nueva edición de la Feria Internacional del Libro se inauguró en Buenos Aires, y con ella llegaron las polémicas y los cruces de palabras entre el ministro de Cultura y los referentes editoriales.



La apertura de la 43a. Feria Internacional del Libro (FIL) estuvo marcada por las declaraciones fuertes. La situación de la industria editorial, después de un 2016 en que las ventas de libros cayeron un 20 por ciento, según dijo en su discurso el presidente de la Fundación El Libro, Martín Gremmelspacher, fue el eje.



Luego de palabras que describieron sin atenuantes el presente del negocio editorial, a su turno, el ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto, apeló a una salida irónica: "Conmigo no, Martín", parafraseó a Beatriz Sarlo, para luego enumerar las acciones de estímulo que lleva adelante la cartera que encabeza y hacer referencia a una situación económica que empieza a reactivarse.


El discurso central de la inauguración, a cargo de la escritora Luisa Valenzuela, también tuvo potencia. Se centró en el lugar de la mujer en la cultura y en el deber de combatir la era de la "posverdad". Entre personalidades y funcionarios también la escuchaba el ministro de Cultura porteño, Angel Mahler, que antes había subrayado la política de estímulo para las bibliotecas públicas porteñas.



Retornando al discurso central, el de Gremmelspacher, en un momento del acto pidió que se libere el pago del IVA en la compra de papel para las editoriales -beneficio perdido en los 90- y advirtió sobre el peligro de un impuesto que habría propuesto el Ministerio de Economía y que gravaría al libro nacional con un IVA del 19%. El editor también pidió recuperar el volumen de compras de libros que solía realizar el Ministerio de Educación y que se redujo el año pasado.





Por momentos a un paso de enojarse, Avelluto respondió. "Esta no es la peor crisis de la Industria editorial. No hay ningún tiro de gracia en ningún lugar sobre un sector que es enormemente pujante, que en muchas situaciones peores, logró salir adelante", enfatizó.



En ese eje adelantó que el Ministerio facilitará el traslado de editores y autores a ferias internacionales, como Liber, en España, que tendrá a Argentina como invitada en octubre, o la de Bogotá, el año próximo. “Con un criterio de selección que no sea el de la simpatía partidaria que se utilizó a lo largo de los últimos 12 años en nuestros país”, recalcó. Entre otros logros, como el crecimiento del acervo de la Biblioteca Nacional, centró entre los objetivos de su cartera "reducir prejuicios y generar mecanismos de transparencia", incluyendo una referencia a los cambios que se llevan adelante en el INCAA. Dos miradas anoche chocaron de frente.