La presencia del astro rosarino, Lionel Messi convulsionó Milán, donde el jugador del Barcelona llegó para participar de una campaña de la casa de modas Dolce & Gabbana. Lio se mostró sonriente tras un día de ser imputado por evasión fiscal.Messi de manera muy simpática trató de atender los reclamos de autógrafos y para fotografiarse con los fanáticos que se agolparon al lugar con casacas de Barcelona y de Argentina.
El ídolo estuvo en el lugar por más de dos horas, entre los fanáticos había incluso un grupo de escoceses y hasta una familia de Lubliana, además de su compatriota, amigo y delantero Mauro Icardi, flamente refuerzo de Inter.
Finalmente, Mesi, protegido por una decena de guardaespaldas y cuya presencia obligó a cortar el tránsito durante varios minutos, se alejó luego raudamente del lugar con rumbo al hotel en el que se hospeda, a pasos de la Plaza del Duomo.
Mañana, el astro argentino cumplirá sus 26 años.
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