lunes, 25 de marzo de 2019

Música/int.: Paul McCartney en el país: cada día canta mejor

A LOS 76 AÑOS, EL EX BEATLE OFRECIÓ UN RECITAL DE CASI TRES HORAS.-

La tercera actuación del músico en la Argentina (segunda en Buenos Aires) fue la de repertorio más elaborado, en la que privilegió el más puro rock 'n' roll (de allí que haya dejado de lado clásicos como "Yesterday"). El público reunió espectadores de todas las edades, desde chicos a coetáneos suyos.

Paul McCartney. La tercera actuación del ex Beatle en el país fue la mejor. Hubo un momento extraordinario durante Hey


“¡Ustedes son grosos!”. Esto fue parte del saludo final de sir Paul McCartney al público que, anteanoche, llenó el Campo Argentino de Polo. Fueron casi tres horas antológicas de un concierto que, en varios aspectos, fue superior a las tres visitas previas del ex Beatle a nuestro país –vino por primera junto con su esposa Linda a principios de los 90; luego en 2010 con la banda actual con la que regresó en 2016-. Pero el público porteño no recibe una visita de McCartney desde 2010, porque los shows de hace tres años fueron en Córdoba y La Plata. Tal vez ese factor haya ayudado a que el Campo de Polo explotara con una audiencia diversa, desde viejos rockers, niños a veces llevados por sus padres –o viceversa-, y muchos millennials munidos de sus celulares para subir todo a Youtube o Instagram, ademas de fans de sir Paul que vinieron desde el interior del país, y también turistas de países vecinos que aprovecharon esta escala criolla en el Freshen Up Tour, que arrancó luego del lanzamiento de su mejor disco en décadas, “Egypt Station”, el trabajo que lo devolvió a los primeros puestos de los charts.

Y precisamente este factor es lo que ayudo a que este nueva presentación argentina de McCartney sea aun mas memorable. Temas como “Who cares”, “Fuh Yyu” o “Come on to me” son ese tipo de canciones que logran que, cuando él dice “Ahora viene un tema nuevo”, la audiencia festeje a pesar de que su asombrosa carrera tiene clásicos de sobra para elegir, tanto de los Beatles como de los Wings. Su banda de siempre suena mejor que nunca, empezando por las dos guitarras salvajes de Bryan Ray y Rusty Anderson, pero además por primera vez en años hay una sorpresiva sección vientos, que a los 10 minutos de empezado el concierto aparecen de la nada tocando en medio del público. Este trío de músicos souleros hace una enorme diferencia para que una de las grandes joyas de “Revolver”, “Got to get you into my life”, suene como nunca (Los Beatles jamás lo tocaron en vivo).

Hay un lado profesional y de viejo lobo del rock que hace que McCartney venga repitiendo muchos de los arreglos desde el tour del 2010. Si bien es cierto eso de que “el público siempre se renueva”, casi como parte de un guión que no tiene muchas ganas de cambiar, regresan viejos trucos como la versión de “Something” con ukelele, el homenaje al Hendrix de “Foxy lady”, los fuegos artificiales de “Live and let die”, y hasta la plataforma elevada que ubica a McCartney varios metros por sobre sus músicos en el intimista “Blackbird”. Y esa no es la única repetición de la puesta.

Con respecto a la lista de casi 40 temas, eliminó clásicos como “Rock show” y “Jet” de wings, casi todo lo relacionado con la era psicodélica –apenas hay dos temas del “Sgt. Pepper” y ninguno de “Magical mistery tour”-, y en un gesto rocker, dejó de lado nada menos que “Yesterday”. Todo no se puede, pero en el lado brillante se reconoce que McCartney está en mejor forma que nunca, y de tanto dar vueltas por el planeta haciendo lo suyo ha empezado a desarrollar rutinas divertidas, como hacerse el agotado y amagar con que se va a tomar un recreo, gag preparado para ir a buscar otro instrumento diferente del inconfundible bajo con el que abre la noche en “A hard day’s night” --de ahí pasa a la guitarra eléctrica, el piano, el ukelele y una acústica.

Hubo gente de todas edades y estilos, que se emocionaron al escuchar “Love me do”, “Eleanor Rigby” o ”Let it be”. Y ni hace falta el catártico trip colectivo de “Hey Jude” que, tal como se ve bien en un video que se viralizo en la web, provocó que los automovilistas que cerca de la medianoche iban por la avenida Libertador detuvieran sus vehículos, bloqueando el tránsito, para escuchar ese himno beatle desde fuera del predio. Pero probablemente la gran explosión de locura tenga que ver con “Back to the USRR” y “Helter skelter”. Esta sí que fue una noche de rock ‘n’ roll con mayúsculas.


=Paul McCartney, “Freshen Up Tour”. Con Abe Laboriel Jr. (batería), Paul Wickens (teclados), Brian Ray y Rusty Anderson (guitarra). Campo Argentino de Polo. Sábado 23 de marzo.

No hay comentarios: